Otra idea sobre el aprendizaje de una segunda lengua
Nos encontramos inmersos en un mundo en el cual la adquisición de una segunda lengua se vuelve algo necesario y cada día más importante, y su adquisición nos permitirá interactuar y desenvolvernos en variados ambientes, en donde encontraremos a personas que hablen otros idiomas. Esto queda de manifiesto en los medio de comunicación, donde constantemente somos bombardeados por información proveniente del extranjero. Hay una variedad de situaciones en las que se puede adquirir una segunda lengua y entre éstas, destacan el aprendizaje de una segunda lengua en un periodo infantil y su contraparte, que vendría siendo en una etapa ya más adulta. El aprendizaje de una segunda lengua está estrechamente ligado al de bilingüismo que es el dominio y la utilización de dos lenguas en una misma persona, con uno uso correcto de éstas, tal como lo dice Ronjat en su libro: (…) Para conseguir un bilingüismo óptimo hay que familiarizar al niño con las dos lenguas desde el primer momento y aplicar el principio: “cada interlocutor una sola lengua”. (Siguán, 1984, pág. 17) En este escrito, se enfatizará el bilingüismo en un periodo precoz. Hay una clara influencia del ambiente y del entorno en aprendizaje de una segunda lengua, esto es evidente y queda demostrado de manera clara cuando a un niño, ambos padres le hablan en dos lenguas diferentes por un tiempo más o menos prolongado, siendo también otro factor influyente, la lengua con la que se comunican ambos padres entre ellos, y la familia. Es importante también el rol que toma cada padre en la interacción con el hijo, ya que si el padre o la madre, generalmente la madre, tiene más cercanía o apego con su hijo obviamente influirá más en el aprendizaje de la lengua ocupada por la progenitora. También es importante el concepto de política lingüística esto quiere decir, sobre la formación de lengua que los padres creen que es la más adecuada para su hijo, esto quiere decir cual es la mejor mirada socialmente, cual lo va a llevar a escalar socialmente etc. La referencia a estas discusiones nos sirve para caernos en la cuenta de lo he llamado política lingüística de la familia, no es exactamente una creación de la propia familia sino que buena parte de lo que hace la familia es repetir las actitudes lingüísticas vigentes en el grupo social del que forma parte. En cuanto a los elementos lingüísticos que influyen sobre el niño y que no son originados en la familia tales como la radio, la televisión, la lengua del entorno, la lengua de la escuela; también forman parte de una política lingüística pero en este caso, no de la familia sino que de la sociedad pública en la que se integra la familia. ( Siguán, pág. 19) También hay que hacer una diferencia en el aprendizaje del bilingüismo, tal como menciona el autor del texto, entre un niño normal y otro con discapacidad de aprendizaje. Finalmente encontramos que hay ciertos factores que influyen en el aprendizaje del bilingüismo, como por ejemplo, la normalidad en el proceso, la similitud con los aprendizajes del niño monolingüe, la alternancia en uso, etc. Para concluir podemos decir que son múltiples los factores que influyen en el bilingüismo, y por ende el aprendizaje de una segunda lengua, la que no se puede limitar solo a unos cuantos factores, ya que en este aprendizaje tiene que ver tanto la familia como en entorno social y cultural en que se desenvuelve la persona. No se sabe cual es la mejor manera de incluir el aprendizaje de una segunda lengua en los niños, nos referimos a que si estos hay que incluirlos de forma gradual, por ejemplo en la aulas de clases o desde que el niño empieza a aprender a hablar junto con sus padres, entre otras situaciones, pero lo que sí tenemos que tener en cuenta, es que adquirir una segunda lengua es muy importante para un buen desarrollo cultural y social, y es algo que ya deberíamos tener todos.
Bibliografía: Siguán, M. (1984). Adquisición precoz de una segunda lengua. Edicions Universitat Barcelona.